VALENTINUS y su día.

Feliz día de San Valentín. Pero de verdad, os deseo un feliz día de San Valentin como día del amor, simplemente, no de regalos, ni frases hechas, no, de San Valentín tal y como cuenta la leyenda que fue ... Se dice que allá por el siglo III en el época del emperador Claudio II existía una ley que prohibía tomar pareja a los fuertes, aguerridos y valientes legionarios del imperio romano, ya que de ese modo al no tener mujer ni familia esperando no tendrían distracciones y su entrega sería total en el campo de batalla. Bien, pues habitaba por esos lares un clérigo, Valentinus, que casaba a escondidas a aquellos legionarios que "víctimas" del amor querían desafiar las leyes del emperador. Esto llegó a oidos de Claudio II que lo mandó apresar, pero Valentinus logró convencerlo de sus buenas intenciones y hablándole de su religión logró salvarse. Esto fue visto como un acto de debilidad y peligro para el imperio por el entorno del emperador que conspiró contra Valentinus hasta que lograron llevarlo a juicio por traición, o conspiración, o vaya usted a saber qué, y después de sufrir días de tormento para conseguir que renunciará a su fe infructuosamente, Valentinus murió el 14 de febrero del 269. Ese es el San Valentín que me gusta conmemorar, el del amor de verdad, el que hace que se desafíen leyes absurdas y que triunfe lo único que puede salvar al ser humano de sí mismo: EL AMOR (con mayúsculas y para todos y todo). Bueno y dicho esto, a mí me encanta este día antes lo celebraba en plan cursilón, ahora me conformo con que mi churri me haga un tiramisú, que es uno de mis postres más favoritos y le sale de lujo. Ah, y de nuevo dejo para ilustrar mi artículo de hoy una chulísima ilustración de Vero Rodríguez.